¡Muy buenas! Una semana más me ha tocado desempeñar el rol de crítica y hoy os vengo a hablar sobre un tema bastante candente y que ha provocado bastante revuelo dentro los fans de una de las personas implicadas en la noticia que os voy a compartir. Os voy a hablar sobre El Caso Nxivm y la esclavitud sexual hacia mujeres.
En 1998 se fundó en Estados Unidos la empresa Nxivm, una supuesta compañía de cursos de "empoderamiento" y "autoayuda" para hombres y mujeres de élite.
Sin embargo, en 2017 una investigación del New York Times reveló que varias mujeres dentro de la organización eran tratadas como esclavas sexuales y denunciaron que tenían que entregar fotos de ellas desnudas, las cuales los altos cargos de la secta usaban para extorsionarlas; las obligaban a seguir dietas que afectaron a su salud y se les requería verlas desnudas para comprobar dicho control de peso; les marcaban con hierro caliente en la piel las iniciales del líder y algunas de ellas eran forzadas a tener sexo con él.
El reportaje también reveló que además tenían sedes en otros países como Canadá y México.
Allison Mack (Foto Google) |
Aquí podréis encontrar más información: https://www.nytimes.com/es/2018/05/30/nxivm-keith-raniere-secta/
Por desgracia la esclavitud sexual es algo que sigue persiguiendo a mujeres y niñas en todo el mundo, y sobre todo en países donde la pobreza está más presente. La Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 consagró la dignidad de los seres humanos, así como la igualdad de derechos entre hombres y mujeres. Pero, transcurridos más de 60 años, continúan persistiendo formas de esclavitud que se perpetúan cada día.
La Unión Europea detectó en 2005 la necesidad de elaborar un instrumento jurídico de carácter global que se centrara en los derechos humanos de las víctimas de trata. Fue entonces cuando España introdujo por primera vez en el código penal en 2010 el detestable delito de tráfico de seres humanos con fines de explotación sexual.
En España, existen cerca de 2.000 centros de explotación sexual que mueven 5 millones de euros al día, según datos oficiales.
En mi opinión, no existiría el tráfico de personas con fines de explotación sexual si no hubiera una demanda. Muchas veces las personas que realizan este tipo de abusos se creen con todo el derecho de poder hacerlo porque confunden el consentimiento de las mujeres a las que someten, con miedo y el pánico que éstas sienten. Las mujeres víctimas son desposeídas de su libertad, autoridad y oportunidad de las que goza el hombre que compra sus servicios. Ellos llegan libremente a los centros de explotación sexual. En cambio, las víctimas explotadas, no.
Las instituciones y las fuerzas políticas deben tener presente que la lucha a favor de la dignidad y la integridad de la mujer va ligada al pleno reconocimiento de los derechos. Las mujeres y niñas víctimas de trata merecen vivir en libertad, sin amenazas de ningún tipo y sin excepciones. Miles de mujeres en situación de máxima vulnerabilidad tienen derecho a que el legislador defienda su derecho a ser escuchadas y protegidas, de manera justa y en igualdad de oportunidades.
Un saludo.
Foto obtenida de Google |
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